jueves, 25 de febrero de 2010


MITOS SOBRE EL TRABAJO INFANTIL

No podemos eliminarlo porque es consecuencia de la pobreza

Una parte importante de trabajo infantil está directamente relacionado con la pobreza de las familias, sobre todo mientras persistan condiciones de miseria en la vida de muchas personas del Sur.
Pero también esas condiciones de pobreza son debidas al sistema económico que las produce y perpetúa. En estas circunstancias sí se puede decir que el trabajo infantil está unido a la pobreza y que conforme se pueda erradicar ésta, se eliminará el primero .La experiencia de los países europeos, en los que trabajaban niños en condiciones muy duras durante los primeros tiempos de la Revolución Industrial, demuestra que la educación obligatoria es la mejor manera para acabar con el trabajo infantil. Los diversos países deben procurar esfuerzos para conseguir una educación gratuita y obligatoria para todos: un pueblo educado, aunque pobre, es menos vulnerable a la explotación.
Es necesario también hacer más atractiva la educación para los niños y sus familias, creando programas educativos flexibles y adaptados a las necesidades de las personas a las que van dirigidos. A esta educación obligatoria puede ir unido el subvencionar a las familias el mantenimiento de los hijos, al menos los materiales escolares o que hagan una comida en la escuela. De esta manera la escuela no se convierte en una carga para la economía familiar.Esta explotación debe ser abolida ya, sin esperar a que mejoren las condiciones económicas de las familias o el propio país, puesto que supone serio peligro para el bienestar de muchos niños.
La estrategia en la lucha contra la explotación infantil debe incluir vanos puntos:
-Exigir a los estados la eliminación de las formas más peligrosas de trabajo infantil.
-Ampliación de la protección legal para controlar los casos de explotación y permitir las actuaciones legales contra los culpables y el auxilio de las víctimas.
-Crear una legislación de sueldos mínimos y horas de trabajo adecuadas, así como responsabilizar a las empresas de sus trabajadores.
-Registro de nacimiento de todos los niños, recogida y supervisión de datos fiables sobre la población y su edad.
-A nivel internacional son necesarios códigos de conducta y políticas de adquisiciones que pongan trabas a productos fabricados con mano de obra infantil.